viernes, 25 de agosto de 2006

No te queiro


De frente y sin decir porque, lo miraba... Alguien podría venir a mi rescate, después de todo lo que ha pasado, lo único que me queda por pensar es que algunas cosas son para mejorar el mundo y esta debió ser una de ella, sin embargo no lo era. En medio del ruido de la llegada de los trenes decidí que era necesario olvidar todo, volver a casa.

No quise voltear bruscamente ni nada, solo camine lentamente mientras buscaba nerviosa por todo, la tarjeta del metro que debía tener en la billetera. El sonido de la maquina y cruzar la manija que nos lleva al anden, pareció que lo vivía otra persona.

Yo miraba por mis anteojos como si ellos me cuidaran de alguna misteriosa sorpresa del destino. El tren, la gente caminada sin mirar, el pito, las puertas cerradas y el movimiento abruto de siempre. La lagrimas no rodaron por mis mejillas, quizás por lo anteojos, quizás porque no valía la pena. La misma sonoriza, irónicamente aprendida para sobrevivir se instalo en mi rostro. Bajar de vagón moverse entre la gente que hablaba, entre otros que se cruzaban con uno como reclamando su derecho al transito.

Salir, el aire, la llovizna y mi cigarro. Para que me preocupo por enmendarlo, si es cierto no vale la pena, quizá siempre fue así, nunca valió la pena. Debería dejar de quejarme y continuar rumbo a mi casa. En la puerta el, mirando. ¿Qué haces aquí?, pensé en preguntar, el silencio fue aún más tenso cuando el no se movió de la entrada, ni me dejo entrar. Se levanto, mirándome las gafas, y me las quito. "Mírame a los ojos" dijo tajante, sin derecho a replica. Con los sentimientos mezclados lo mire. "Te quiero..." yo no quería responderle nada, no quería, mi inconsciente si gritaba en mi cabeza "Yo te quiero... yo te quiero", la pausa fue eterna, le respondí cuando ya no resistí lo tensa de la situación. "Para que viniste… no estaba todo claro cuando me fui…" .

El repitió con mas convicción "Yo te quiero", como si esa frase me convenciera de pensar diferente, comprenderlo “Yo te quiero!...”. Podrás repetirlo mil veces y no voy a creerte, no dices la verdad y lo se, fue la frase que daba vueltas, arrancada de mi subconsciente, la frase que no quería admitir aún.
Me abrazo como intentando retener un pedazo de lo que fue un nosotros, y la verdad no se que paso, fue como un cortocircuito en mi cabeza, lo abrase por un instante, lo solté sin miedo, abrí la puerta y cerré con pastillo. Se quedo por más de una hora sentado en la entrada, mirando el infinito, se levanto con los ojos llorosos y no regreso más.

En mi memoria si regresaba, una y mil veces caminando hacia el paradero, besando a la extraña y sorprendiéndose al verme, siguiéndome por la calle hasta el metro, reteniéndome sin ser capaz de hablar, incapaz de hablar…

Mak

jueves, 24 de agosto de 2006

Recopilando ...

Viajes, cambios, desconocidos. Para mi son sinónimos de mi vida diaria, entre los pasos por el laberinto de la existencia. Todos vamos inmersos en esta nuestra realidad donde conocemos un vocabulario similar, procedimientos correctos y mil cosas más que nos hacen más urbanizados de lo que queremos admitir.
Conocemos un limites respetable, miramos a lo otros de frente, buscamos un segundo de la magia de la vida y lo recordamos por el resto de nuestra existencia, por es en definitiva lo que realmente importa ese detalle en el que tenemos la emoción que depuse desgranaremos para buscarle alguna otra explicación.

Somos seres complejos, componentes de algún extraño modo de ver, sentir, y hablar, cuando nos relacionamos estamos ando algo de nosotros. Al viajar abrimos los sentidos para estar mas alertas y ver todo lo que hay alrededor.

Cambiamos, nos transformamos y mejoramos o empeoramos, pero que pasa cuando lo similar ya no significa para nosotros lo que para otros, cuando algo es tan similar que pretendes hacer que calce como una pareja sin discusión cuando en el fondo son similares, pero no iguales. Dónde quedo el lado de la vida en que uno se tomo los dichos de otro a la ligera y el problema más grande era una desilusión, un simple resfriado o tal vez un poco de incertidumbre el tan mencionado: ¿Qué va a pasar? Qué pasa cuando ya no eres chico pero tampoco grande, Cuándo te falta independencia o no la tienes sin saberlo, Que es lo que pasa con la vida cuando te levantas y ves el techo sin tener un sentimiento, sin decir uf, que mal o siquiera de estar perdido. Estas en el limbo… o llegaste donde los adultos llegan en sus vidas, de esto se trataba crecer… Mak

lunes, 21 de agosto de 2006

Comienzo


Desde hoy más por un error que por una cosa que deseara de verdad, he creado mi propio Blog. Sin animo de ser superficial, me encanta ahora esa idea.
Anticipo que he tenido mis serias complicaciones con la ortografía, no se si soy yo o el teclado, en más de una ocasión me ha tocado traspasar todo a word y revisar, pero ese sistema no es infalible y en mas de una ocasión me han aparecido errores simples o de entendimiento con el sistema de corrección.
No tengo idea si mi vida, mis sueños o alguna de las cosas que podría llegar a escribir son de interés público o no. Aun así, optimista como me caracterizo, buscare hablar de alguna cosa que sea interesante.
Les saludo a todos, y solo les pido... sean honestos…

Mak