martes, 31 de julio de 2007

hablando de...

Miraba la locura de otro sueño que no tiene mucha explicación lógica y mis ideas iban desde el mismos echo de que extraño bañarme en el mar con lo frío que es, hasta que cuando salgo con alguien de pronto no se ver que mis afectos son desiguales ya sea porque el me mira con otros ojos o porque yo no veo que con que ojos me ve.

Así que entre mis ideas sobre el mundo creí pertinente pedir ayuda, y si la ayuda vino a mi, entre frases simples y directas escuche una de las pocas verdad des que no me gusta escuchar, soy una niña para tomarme las cosas del corazón, los amores y también las relaciones de pareja, una niña que a mis años no me puedo dar el lujo de ser y una niña que debería haber sacado en limpio parte de las artes y desastres de una vida rodeada de muchos, con poco tiempo para meditarlo todo y que ahora esta recién tomando el cuerpo necesario para ser realmente una vida para mi.

Debería quizá releer el pasaje en que no deje una posibilidad sin probar, o quizá solo recordar que depuse de eso el dolor de cabeza iba a quien puede ser el padre y no en que al fin estoy libre de todos ellos. O tal vez debería tomar en cuenta que para variar una mirada mía vale las mil cosas que suelo escuchar, o que de pronto no puedo pretender echarle la culpa a la residencia por olvidarme de todo lo malo que ocurrió entre mi ir y venir de mis relaciones personales.

Extraño a Marcelo mi mejor amigo, quien siempre sabía leerme entre líneas y decirme como apuntar mis dudas a una respuesta mas simple y real, extraño salir de una lado a otro sin preocuparme a quien veré, porque nadie te conoce en la capital. Extraño estar en mi pieza la tarde entera bordando y dejando correr mis pensamientos mientras que el mundo loco gira mas rápido de lo que percibo.Quizás sea realmente que no he aprendido todo, como yo trato de cómbenseme, y tal vez es necesario salir un poco del cascaron cuando se esta en casa, aprender a admitir que alguien le gustas es tanto o mas complicado que decidir si ese alguien te gusta a ti.

Quizá estoy demasiado acostumbrada a involucrarme porque el quiere, y no porque yo quiero y para variar me esta jugando una mala pasada. O simplemente no quiero admitir nada de lo anterior porque eso significa releer mi vida que creía conocer bien. El caso es que tengo un minito solo un minuto más y ese vale la pena que lo viva con intensidad, respeto y conciencia, así que los dejo, tengo que tomar un libro pesado que esta en mi corazón para empezar a dilucidar cosas que no respondo todavía…
Macarena

martes, 24 de julio de 2007

Factor X

Salir del caos, entrar al mundo real... veamos que pasara
Incredulidad o quizá falta de credibilidad, la verdad no se.. . una de dos, o simplemente la tercera, la que excluye todo, no tengo entendimiento del tema.. . Veamos, tengo para variar un simple dilema de proceder, que para variar me deja entre mis inquietudes una variante que no contemplo, el factor X, o mejor conocido como existencialista. Desde que empecé a retomar mis conflictos para hacer de ellos un desarrollo mas racional y entender porque a veces repito el patrón, he aprendido a cambiar mi actitud frente a ciertos temas, crecer entre mis cosas y modificar mis irremediables dilemas de siempre por cosas mas remediables y mas simples, pero estoy en jaque, entre mi cordura y lo que ralla en la locura, porque otra vez se presentan los temas esparcidos entre dolores antiguos, que no tiene solución y de los que desconozco su exacta cauda, y dolores nuevos que simplemente son quejas de la incomprensión de los ya mencionados.
Claro si fuera mi cabeza la que hay que analizar, estaría mas cercana a la respuesta, sólo que este es el dilema de otra persona, que simplemente me atañe porque creo ser la reacción química que hace enfurecer y provoca los clásicos síntomas de estrés, mal humor, mala disponibilidad, etc. Si, como si no me tolerara, y esto no es algo que yo simplemente crea, es un hecho que se repite tanto en el tiempo que simplemente tengo que asumir, la parte que me conflictua es que no se que mas hacer…
Lo intente.. . creo que todo, desde no escuchar, hasta no responder, pasando por intentar entender algo hasta llegar a simplemente reaccionar, y en ningún caso he logrado nada, absolutamente nada.. . otra vez parada sobre lo mismo, un incierto estado anímico y un sin fin de preguntas, sin respuesta sencilla o clara, ente las que mas se repite en mi cabeza, ¿Como puede alguien tener esa clase de sentimientos?, y es que de verdad no creo concebible en un ser humano ese tipo de sentimientos, increíblemente cierto todo esto me atañen a mi, el tercero cree que mi factor X los tiene… lamento desilusionar a todos, pero no tengo esos sentimientos, mis dudas existencialistas casi todas con respuestas creadas previo análisis exhaustivo de mi misma, conversaciones con amigos y análisis de una amiga psicóloga, declaran que no soy de odios o de amores irremediables, no soy de furias paridas ni de fuegos insolubles, yo soy de de miedos guardados, de dudas existencialistas, de sentimientos racionados, de amores y de desamores analizados, escritos y vueltos a analizar, de simple desinterés o indiferencia, de verdad creo que el peor insulto para un ser amado es no amarlo mas.
Si lo se esa es mi opinión, pero en serio, que creen que es peor no amar más al otro o darle mi odio, si mi odio en definitiva significaría que aún lo amo solo que con malos sentimientos, y no amarlo, significa que no te importa mas, y eso es mas fuerte creo yo, que cualquier otro sentimiento, la indiferencia… pero repito mi inquietud, ¿como es posible que tenga ese tipo de sentimientos?… será que él otro los tiene y por eso los cree reales, o es que el factor X de esta otra persona simplemente cree que la vida es una novela mal escrita con ir y venir de locuras, irracionalidades y sobretodo sentimientos fuertes ocultos en los trozos o alguna patraña semejante de novela poco desarrollada y muy justificada en lo malo de las personas…

No, no comprendo, así como no comprendo a la gente que no llega a consenso para superar un conflicto, así como no comprendo a la gente que hecha en cara todo, así como no comprendo la falta de seriedad cuando se requiere o la falta de humor. Si, se supone que todos vamos crecido para algún lado, y yo creo que crecer significa conocerse mejor, así como dice el dicho “Saber tus defectos te hace mas fuerte”, porque cuando reconoces tus defectos eres capas de admitir los y por ende protegerte de ellos, asumir que uno puede mejorar porque se conoce mejor, ósea pedir disculpas cuando eso sea necesario y escuchar con agrado los halagos… y si es posible que lo que yo creo lo vean otros, entonces estoy en la razón, no es probable que yo tenga sentimientos como los que se me atañen… porque definitivamente los sabría míos… no entiendo, sigo sin entender, porque si creo conocerme y es cierto me cuestiono muchísimo a mi misma, no sería posible entonces que simplemente no sean míos, sino de la otra persona?

miércoles, 11 de julio de 2007

Tres

Se irguió contemplando la escena, que parecía sacada de alguna novela de ficción del tipo “sostente que ahora se volverá todo al retroceder”. Solo que no ocurrió nada, sus manos se extendieron a la ventana sin que ella notara que comenzaba a acercarse a ella, y golpeo el vidrio con fuerza gritando su propio nombre. Sintió las manos fuertes de alguien sostenerla, no vio su rostro ni supo cual era el aroma que la envolvía, solo escuchaba las frase “¿Qué pasa… amor dime qué pasa?”, y despertó en sus brazos, desnuda mirando por la ventana, no supo que decirle exactamente, miro la verdad del frente para cerciorarse que no fuera real que no hubiera estado allí besando a nadie.

Al amanecer ya no tenía sueño, sus manos estaban enlazadas a los brazos que la rodeaban, más para evitar que se volviera a levantar sonámbula, que para demostrarle amor. Cuándo a el lo venció el sueño, ella se libero de los brazos y se vistió, comenzó a caminar por la casa, estaba desconcertada, algo de lo que había soñado repetía de lo que ya había vivido antes, y no le gustaba esa sensación de que el destino tomaba posesión del presente, para ella su destino tenía que ser armado por ella misma, por sus decisiones, pero si se apoderaba de todo trataría a toda costa de revertir la situación… sentada en la sala trataba de meditar, cuando dio con la clave.

Él se levando soñoliento, no tenía claro en que minuto se había levantado ella, pero sabía que lo estaría esperando con el desayuno listo, era su acostumbre preparar el desayuno con café recién colado y pan hecho por ella, que sinceramente era mil veces mejor que el de la panadería de la equina, y así llego al living donde ella tenía armado su desayuno. La miraba como simples, con cariño y sueño, mezclada con la duda como hace para tener todo, cuando noto algo extraño en sus movimientos, no supo si preguntar o esperar a que ella le contara que ocurría.

Pasaba el desayuno en ese silencio ansioso de hablar, pero no se decían nada, el pan estaba especialmente rico esa mañana, y los ojos de ella estaban más cansados que de costumbre. La mañana comenzó a aclarar cuando ellos aun sentados en su mesa de día sábado comían su desayuno. Lo miro a los ojos y sonrió por primera vez en un largo tiempo. “Tenemos que hablar” dijo ella mientras bebía a sorbos cortitos el café recién colado, que hervía. “Tengo que contarte algo importante, y solo te pido que me dejes hablar hasta el final antes de hacer algún comentario.”

El asintió con la cabeza, le costaba entender las frases que comenzaban con: “Tenemos que…”, en su fuero interno siempre cría que serían el comienzo de la ruptura, pero ella salía de la estadística, era tan diferente, así que trato de calmar al el gusano de la tripa que salto en ese minuto y la mirada de ansia comenzó a ser de miedo. “Tengo que confesarte algo’ comenzó lentamente-… soy bruja…- se apresuro a terminar la frase.” Así sentados frente a frente, ella comenzó a explicar toda una verdad que el desconocía, mientras las palabras formaban frases aisladas que explicaban cosas que el se había venido preguntad desde hacía mucho tiempo y adquirían esa especia de certeza justificada de cómo no lo vi antes, o lo sabía, llego a cree incluso que todo era demasiado claro para que no lo viera.

“Cuando nos conocimos venia de la casa de una clienta, que esperaba que le dijera si pareja le era infiel, la pareja en cuestión no le era infiel, pero ella si lo era. Y para variar me toco convencerla de que tomara una decisión sobre su presente, porque su pasado estaba lleno de contradicciones que probablemente la harían sufrir mucho en el futuro… a eso me dedico en mis tiempos libres, y por eso cuando llego tarde no tengo ganas de hablar, me da miedo que algo de lo que a otros le ocurra provoque esa irremediable ruptura entre nosotros, aunque debo confesar que eres el único que ha pasado todas las adversidades y me hace feliz… en fin, no sabe mucha gente este secreto… casi siempre me conocen bajo el seudónimo de la bruja y ya, no saben mi nombre, ni donde vivo, lo que hago para ganarme la vida, y jamás me saludarían en la calle si me en contratar, el pacto es de guardar el secreto, que obviamente cuentan a solo un par de amigas que terminan llamándome y en fin sigue el siclo… creo que ya lo dije todo…”

Tenía la mitad de pan en las manos, con tres mascadas y la expresión de incredulidad que le hacían decirse a si mismo “Ahora si que la supiste hacer una bruja, que sabe de brujería?... tanto como de magia, tanto como de sueños, como de mentes, como de mil cosas que no se si quiero saber…”
Te entiendo, le respondió ella al silencio que había entre ambos, aunque algo alcanzaba a entender de sus pensamientos, no solía ver su mente, le gustaba respetar su espacio, así sorprenderse con sus cosas y no sentir que era algo obvio…

El la miro serio, dejo el pan en el plato y se levanto, aunque el miedo lo invadía acercándose a ella, la abrazo con una fuerza extraña que luchaba internamente por no dejarse asustar por el miedo a la palabra bruja y la convicción de que esta era su mujer, la que amaba, la única que quería amar en el mundo. “Te quiero” le dijo en su oído…

domingo, 8 de julio de 2007

Dos

Tomo impulso y corrió a el y pegando una pequeño saltando para caer en sus brazos, tenía la alegría a flor de piel y entre medio de las vueltas que el daba con ella en sus brazos despego nuevamente cerrando los ojos y dejándose llevar por la embriagadora sensación que hace unos segundos había comenzado a sentir, y sus pensamientos se tornaron calidos, con la idea de estar en medio de una arboleda llena de hojas esta vez haciendo el amor en medio del crepitar de los árboles y el crujir de las hojas secas a su alrededor... y abrió los ojos, el cemento y los edificios la trajeron de regreso al presente, no sabía donde era ese lugar pero si se repetía era importante, si se sentía tan cómoda en el era más trascendental de lo que podía admitir y lo mejor era esperar a que se develara el echo que la hacía llegar hasta el.

De regreso en casa, con el tazón de café en las manos, la contemplo hablarle, mirando sus labios, sus manos, sus movimientos. Las palabras flotaban en el aire y el simplemente estaba tranquilo había tomado una decisión, que los unía para siempre. Ella se quedo dormida, estaba exhausta… en sus mansos encontró un trozo de papel, una figura se lo entregaba antes de partir una loca carrera por el sendero frente a ella, su mirada de alegría se confundía con el miedo de que los hallaran en pleno campo, y sin saber como corría en dirección opuesta, tenia que llegar antes de que se enteraran de su salida… un enorme silencio se interrumpió cuando despertó casi sin aire, respiraba agitada, y se levanto para ir a la pieza, por alguna razón tomo se detuvo a mirar por la ventana, y en la vereda del frente vio algo que la descoloco, la figura de una mujer y una hombre besándose, la primera impresión cedió al entendimiento de que en la ventana estaba ella y un hombre no su amado, ni siquiera algún conocido, un hombre que ella besaba apasionadamente, con la locura del amor prohibido.

viernes, 6 de julio de 2007

Uno

La lluvia caía en su cara, y no le importaba estaba dichosa como si de pronto ya no hubiera nada mas que hacer… reír... tendió sus brazos hacia le cielo y mirando la luna que se asomaba entre nubes y pego un grito, sentía como la adrenalina hacia efecto en sus músculos cansados y la satisfacción de que al fin había cerrado un capitulo largo, complicado y difícil de comprender. Tomo el impulso y corrió por la calle riendo sola, mirando al cielo, sintiéndose libre de verdad, como si su paseo fuera por el sendero de una arboleda vieja, repleta de hojas que amortiguaban el agua y al final del camino le dijeran en los ojos verdes de ese hombre que amaba aquí te espero.

Abrió los ojos, ya le había pasado antes, estar en un lugar y ver recuerdos que no eran de ella o de ahora o del lugar en que estaba. Siempre que estuviera sola, podía pensar en ellos, darles la vuelta, ver que era lo que la unía a ese recuerdo... solo que desde hace un tiempo no estaba sola y como era de suponer a pesar del impacto del recuerdo debía volver a la realidad lo más rápido posible, recupero su sonrisa y lo miro a los ojos sonriendo, lo miro desde la distancia.

En el correr por la calle se habían distanciado y ahora de frente la contemplaba sonriéndole. La primera vez que estuvo junto a ella le pareció extraña, ahora que la conocía podía entenderla, mirarla y saber que estaban juntos, hacer mil cosas y reírse de los problemas por que de algún modo todo estaba tragicomedia que los había estado rondando desde que se vieron hacía casi un año los había unido y echo mas fuertes.