miércoles, 18 de febrero de 2015

Entrar al mundo real... soltera de verdad

Después de la confirmación de mi hermana sobre las nuevas noticias y que por ilógico que parezca son de él, de lo que él decidió me quede igual… debería dolerme esto?.... Mmm…. En serio ¿debería dolerme?

Y la respuesta es asombrosamente, que no.

La explicación no es tan asombrosa en realidad, porque no es que no me duela, es que me duele lo mismo que cuando decidí salir del circulo en que me tenía metida esta relación, hace mes y medio, así que mi capacidad de sufrimiento por él no ha aumentado, lo que me agrada, y no me sorprende su decisión, lo que desconcierta a todos, incluida mi hermana… algo que sí debería sorprenderme es que él tomó una decisión por fin…

Aunque tal vez no me sorprende que se quede allá, porque era lo que creía él haría o lo que por deducción lógica ocurriría y lo más absurdo del asunto es que como antes, ahora de verdad no me conmueve su decisión, después de todo durante los últimos ocho meses le había repetido en todos las formas posibles que si su felicidad era allá, se fuera allá y listo, porque aunque me dolería es mejor tener claro el asunto sobre donde quería estar él y dejar a un lado esa ambigüedad que había entre nosotros... y el decidido quedarse allá.

Bien, anoche me dormí sin pensar en él y aunque no sé qué habré soñado, no desperté queriéndolo cerca, por alguna razón tengo la sensación de que me quité un peso de encima, como sé que para mí querer es difícil, dejar de quererlo va a ser una tarea que me va a tomar tiempo asimilar, o como ya lo dije hace un tiempo, “Debo dejar de quererlo” y ese deber cuesta más de lo que me agrada admitir, parece incluso lógico que sienta menos presión ahora para olvidarlo, después de todo él se va a quedar allá y no va a volver, la distancia va a hacer lo que mi corazón no logra hacer, desprenderme de él.


En fin, soltera de verdad, queriendo olvidar sin odio y viviendo la vida en la gran capital, que cosa puede pasar?

lunes, 16 de febrero de 2015

Salir del caos... en luna menguante

Luna menguante, queda poco para la luna nueva...

Mi corazón a dejado de armarme escandalo si no hablo con él, mientras que mi cabeza vuelve a la calma y la pena va quedando de a poco a un lado, aun me duele quererlo sin retribución y como ya he declarado antes más vale que me acostumbre a que así va a ser por un largo tiempo más.

Esta mañana desperté distinta, ayer hice de todo para dejarlo ir y aunque sé que soñé con él esta mañana, no quise preguntarle a mi inconsciente que habrá pasado en ese sueño y no quiero que me importe, de verdad que no… tengo que solucionar los detalles del mundo que están armando mis líos diarios y dejar de creer en imposibles.

Al final siempre he sabido que si las cosas no se dan de un modo natural, si el instinto no te acerca a una persona, no vale la pena forzarlas, él no fue capaz de decir que partía… no fue natural para él creer que me tenía que comentar el tema, no supuso que me dolería su actitud, bien no puedo hacer nada, el destino se encargara supongo de recordarle que hiso mal, y vale, el destino será quien equilibre las cosas eso quiero creer…

Quisiera decir que esta historia esta atrás, que daría por decir que no me importa nada... pero no es así, bastaría una llamada suya para retroceder hasta antes de la semana en que me rompió el corazón en dos y sé que hasta trataría de olvidar como me he sentido en estas últimas semanas para poder besarlo sin reprocharle nada, pero la verdad es que también sé que no llamará, algo me dice que le herí su orgullo, que irónico que el orgullo nos separe, sobre todo porque yo no soy una persona orgullosa y solo creo en lo que es correcto, más irónico es que es el mismo orgullo que nos había separado antes, el mismo que lo hizo sacar conclusiones equivocadas o compararme con sus ex’s y olvidar que hablaba conmigo y que alguna vez me dolió tanto como la decisión que tomé de dejarlo ir…

Uf como salen cosas mientras vierto estas palabras en el pc, para entender que no hay como volver a tras sin un cambio real de su parte y como siendo muy francos yo no lo creo posible, tomé la decisión de olvidando, ahora un detalle técnico importante, él tuvo dos años para hacer algo al respecto y si no fue capaz de entender mis reiterados "toma una decisión"-una frase que le dije textualmente cientos de ocasiones- no veo como lo podría hacer ahora.

El pecho se me aprieta con esa frase "debo dejarlo ir", es una frase tan simple y aun así cada vez que la escribo me duele, porque al final sé que es un deber que me cuesta más que despertar por las mañanas y más aún que estar trabajando en verano … tal vez por eso, no quise escribir estos días, porque cada vez que escribía mi recuento, cada vez que escribía esa frase me duele otra vez… y extrañarlo no es lo más complicado, en serio, lo que si me complica es no entender como hice tanto por alguien que no fue capaz de hacer ni la mita o nada realmente concreto… dicho de otro modo: ¿Trato de tener algo serio conmigo? No. Trato de ser un compañero? No. Trato de quererme?, no lo sé… sinceramente nunca logré entender cómo funcionaba su cariño, como era posible que fuera mío por el tiempo que estuviera en mi casa, entregado en todo sentido y cruzando la puerta… distante… incapaz de decir “te quiero”, llegó un punto que deje de decir "te quiero" y es extraño saber que nunca entendí si eso significo o no algo para él… aunque claro está que yo deje de decirle te quiero, porque el ya no lo dijo más y me sentía extraña siendo la única que se lo decía, además debo aclarar que él nunca preguntó tampoco porque deje de hacerlo, así que no sé qué pensara al respecto.


Tengo las cabeza más clara, aunque me duele el pecho, tengo la sensación de que los eventos van a tornar todo de otro color más pronto de lo que imaginaba y que mis ojos se volverán a inundar de esa chispa que no sé cómo adquieren cuando la calma y paz regresan a mi vida, aunque solo sea por un breve periodo de tiempo, por ahora solo me queda olvidarlo y mientras la luna menguante me deja pensativa y espero que reaparezca la luna creciente que me suele dejar llena de energía...

lunes, 9 de febrero de 2015

Salir del caos, entrar al mundo real...te tengo que olvidar...

Sacármelo de la cabeza es tan difícil, que hoy decidí que voy a tener que vivir con su versión en tamaño neurona en mi cabeza, y digo tamaño neurona porque es el dentro de mi cabeza, su recuerdo juega a recordármelo y a traerme las preguntas sobre si es o no justo lo que estoy haciendo… y no digo que tenga la respuesta a cada una de las inquietudes que su versión me plantea durante el día, pero si es cierto que tengo que dejar de alargar lo inevitable, porque al final sé que es mejor que empiece a olvidarlo ahora que aún tengo fuerza de voluntad y entereza para no hacerme pedazos con la realidad, que en un tiempo más cuando el invierno me ponga más sensible de lo que me agrada admitir y tenga que vérmelas con su miniatura y mis falta de respuesta a las inquietudes de hoy no va a ser tan difícil hacerlo a un lado, hacer mis tareas dejando que su miniatura aparezca en casa detalle del día y simplemente seguir.

Porque lo he pensado tanto, como lo he intentado dejar de pensar y al final la respuesta es terrible, no puedo sacarlo de mi cabeza a voluntad, así que dejémoslo en que no se puede ser víctima de alguien que usa el silencio como respuesta y uno escoge ponerle significado, y que mi política de que la vida se encarga de poner sobre la balanza las cosas, es la que espero que haga lo suyo en él, porque es más agradable dejarle todo a esa fuerza misteriosa que ayuda cuando menos lo queramos, que proponerme hacer algo a favor o encontrar, si sé que mi conciencia me va a criticar de principio a fin y no me va a dejar dormir bien por las noches.

Cierro los ojos, me duele y no ha bajado la intensidad de este dolor, me siento mal por hacer esto de este modo, me molesta no haberle dicho a la cara “se acabó”, pero que saco con eso? Una respuesta de su parte?, ya me queda claro que no va a ser así. Que cada oportunidad que tuvo de decirme algo se fue a sus excusas de siempre en las que era yo la que “generaba estas cosas” –sus palabras no las mías.

Cierro los ojos en la noche y trato de dejarlo ir, sus manos aparecen en recuerdos y las alejo, sus ojos me buscan en la oscuridad y le pido que se retire de mi sueño, mientras mis pensamientos giran en torno a los próximos cambios, el aparece preguntándome “Estas segura?” y por un segundo miro su fantasma frente a mí y luego recuerdo que ya no le tengo que dar explicaciones.

Miro el camino en la mañana, miro los autos y pedaleo sin pensar en nada, pedaleo queriendo llegar a la luna para conseguir mis sueños. Para el medio día cuando me falta el ánimo, cuando quiero irme a otro lado porque estoy agotada, su recuerdo me dice “buscaste otro trabajo?” porque se lo había prometido… iba a buscar otro trabajo, para no quejarme más del que tengo… miro su figura desaparecer mientras mis manos siguen tipiando lo que tengo que ingresar en oficina de partes y cuando estoy terminando el día miércoles, controlo el impulso de llamarlo para avisarle que estaré en casa de mis papas, controlo mis manos para no hacer una estupidez y retroceder todo lo avanzado.

Lo cierto es que tal vez nunca lo olvide, la vida quiso que fuera el comienzo de mi segunda parte en relaciones emocionales y aunque con el volví a ser alegre, volví a reír a carcajadas y volví a sentirme mujer, soy yo quien ahora lo está dejando ir, soy yo quien quiere una relación entera como dicen ahora una relación 24/7, que dure lo que dure, pero que no esté condenada a terminar antes de siquiera haber dado el primer paso juntos, soy yo quien quiere más para mí y fue él quien no fue capaz darme más que esos momentos, ese pedazo con bordes definidos y si derecho a pedir más.


Regreso al presente y miro la hora, es tan tarde quisiera correr a sus brazos, si solo supieran que son solo míos… me auto censuro y sonrió a mi reflejo, estoy más delgada aun… parece que me hubiera encogido en estos días… vamos hay que seguir adelante.

domingo, 8 de febrero de 2015

Hiper molesta.

Mientras intentaba hacer que mis pensamientos se calmaran, porque estaba harta, solo pude llorar. Hablar con mi hermana no ayudo en nada y para cuando mi jefa volvió a hablar conmigo yo era un total desastre. La verdad todo me tenía superada, desde la situación en la que tengo cero valor para mis jefes, hasta que me hicieran siempre a un lado aprovechando que no alego y simplemente hago las cosas.

Me había sentado junto a mi jefa porque de verdad quería entender cómo es que a otros les dan oportunidades y cosas que a mí me niegan simplemente, antes de terminar tan harta que le ofrecí mi renuncia… La vuelta de la esquina entre el escándalo y la locura temporal se apoderaron de mi razonamiento y no es que me tome a la ligera mi situación, es que estoy colapsada al punto que mi organismo gatillo una enfermedad auto inmune porque simplemente he dejado que me sobre carguen de trabajo sin decir nada, porque valoro el equipo y mi sueldo, así como la estabilidad económica que tengo, pero lamentablemente, valorar todo eso no hace que me sienta menos abusada laboralmente y menos valorada al minuto de sacar cuentas sobre mi desempeño.

Mi hipertiroidismo así como cualquier enfermedad auto inmune, es la respuesta de mi cuerpo a los factores externos y tiende a auto atacarse simplemente, para ser más precisos me duele el cuero entero literalmente, la mitad de la semana, no duermo, no como bien, no mantengo peso, no logro concentrarme en casi nada, y mi presión sube al punto que me hace sentir mal, mi organismo está en guerra consigo mismo, loco? No algo completamente normal en esta vida moderna.

Como les decía algunas veces a mis padres, tengo la sensación de que mi organismo está en estado de “huida”, que es un estado primario que se activaba cuando te ves en peligro y tienes que huir, piensas más rápido, tu cuerpo bombea adrenalina para que corras más rápido de lo que podrías hacer regularmente y no sientes cansancio alguno, porque tienes que huir, tienes que salvar la vida, el depredador viene por ti y tu instinto te hace salir corriendo para evitar tu muerte… Claro que ese instinto primario de huida, no sirve de mucho en este tiempo moderno, en el que los depredadores no andan libremente por las calles y las emociones las debes manejar de modo más analítico, pero aun así pueden activarse los estados primarios, claro que el más conocido es el estress, ese instinto que se relaciona con la caza, en que los humanos buscaban la presa o estaban de camino a atraparla, en ese estado de estress primario, el humano podía recorrer largas distancias sin comer, dormir, o hacer sus necesidades, ese estress era beneficioso para conseguir su objetivo “comida”… hoy en día ese insisto es casi inútil, no hay que cazar, no es necesario huir y sobre todo nuestras necesidades básicas están cubiertas, lo que hace que olvidemos la herencia recibida de los ancestros homo sapiens… nuestros instintos primitivos nos suelen causar más estragos de lo que quisiéramos admitir.

Y en eso, en eso me enfurecí, cosa que es algo relativa del hipertiroidismo, perder la paciencia y enojarse con mayor facilidad, me molesté y trate de no irme de madre mientras hablaba con mi jefa y le decía que ya era suficiente, me molesté porque me siento pisoteada, mal… y créame, he tenido muchos trabajo, en muchos lugares diferentes y jamás había llegado a este punto, en el que en serio sintiera que no vale la pena ir al trabajo, que no vale la pena el sueldo y que no importa lo que haga estoy siempre a prueba, como si nunca fuera suficiente, ni los tres años, ni las mil cosas que he hecho… nada… miré a mi jefa y ella me pregunta si estoy más tranquila… tranquilidad esa es la palabra, no tengo tranquilidad en mi trabajo, no importa si estoy haciendo las cosas bien o mal, no tengo tranquilidad… qué más da?… nada, simplemente no voy a tener jamás tranquilidad, que frustrante.

Mire la situación cuando salía de la oficina y me sentí mal, porque de verdad pareciera que arme una pataleta y que por eso me hicieron caso… pero es que no ven lo que me están haciendo? No ven que es un abuso que me carguen con responsabilidades de otros dos cargos?, no ven que deberían velar por el buen desempeño de sus trabajadores? Que tratar bien, así como hacer bien las cosas no es gratis? Que tener todo para todos, surtido, completo y sin errores es un esfuerzo consiente? No ven nada?

Me senté y volví a llamar a mi hermana, quien me decía que debía respirar profundo, que debía hacer las cosas que pensaba pero no perder la calma, y seguía sintiendo que estaba contra la pared, que hace rato me tienen agotada y que ahora exploté, que tal vez mi jefa no se merecía mi escándalo, pero que en serio es absolutamente irónico lo que están haciendo, casi inequívocamente están diciendo: no nos importas, nada de lo que hagas nos importa, nada de lo que puedas hacer ni bien ni mal, tu trabajo es prescindible, y al mismo tiempo, nadie puede hacer lo que tú haces, no tienes reemplazo, no hay quien pueda ocupar tu lugar….


Llegué a casa agotada, con la cabeza a punto de estallar, blanca como papel, sin hambre y pensando, porque rayos tengo que aguantar tantas cosas? El futuro de mi hijo no está en tener una mamá así de agotada, el futuro de mi pequeña familia no puede ser tan inevitablemente agobiante, con la incertidumbre de que otra vez me van a pisotear, o a sobre cargar de trabajo, o a obligar a tener que estar entre una y una hora y media extra, sólo para cubrir una parte de lo que solicitan…. No, me niego a seguir así… voy a buscar otro trabajo y va a ser no solo mejor remunerado que este,  va a ser un mucho mejor ambiente laboral, porque en serio ya es hora de que mi vida vuelva a la calma que merece y voy a dejar de sentirme culpable de querer salir de ese lugar de trabajo, porque no vale la pena quebrarse la cabeza para volver a foja cero todas las semanas, a criticas, chismes y malas expectativas siempre, esto es suficiente..

martes, 3 de febrero de 2015

Salir del caos, entrar al mundo real... Tic tac...

Tic tac… tic tac… escucho el reloj de pulsera mientras trato de concentrarme en pegar las cajas que compre para vender chocolates y galletas. Tic tac… rayos porque el tiempo pasa tan lentamente cuando estoy triste?

La mirada en la caja esta quedó mejor, no se marcó el borde y está bien pegada, esto de ser autocritica me hace ser perfeccionista al punto que me exaspera un error, aunque tengo claro que no debería ser así de exagerada, pero lo soy… Exagero todo, así como mi imaginación vuela y lo creo planeando un viaje para venir hasta mi puerta, pero todo se desarma cuando recuerdo que él no es como otros, como el que era capaz de pasarme la cera en las piernas para no perder un segundo junto a mí, o el que era capaz de estar todo el día diciéndome lo feliz que era solo por estar tomado de mi mano… “Si es cursi –me repito sola en voz alta- que cursi te has puesto, deja a los otros en el pasado, recuerda que por algo los dejaste, aunque ahora no te acuerdes de lo que hizo que no funcionara“

El Che aparece entre medio de la historia después de un año y medio sin tener idea en que parte del mundo anda, hablamos…  y para mi sorpresa sigue siendo el irreverente que me hace reír, el hombre capaz de decirme las verdades más absolutas y sacarme una carcajada… ¿por qué terminamos hace ocho años? Ha verdad, porque él es cinco años más chico que yo y sentía que yo era para algo serio, eso lo incomodaba, porque se proyectaba pero no quería hacerlo porque tenía 19 años, si hace ocho años un hombre se complicó porque sentía que era para cosas serias y hoy otro no me toma ni de apunte, que ironía. 

Me pregunto qué pasaría, si él Che supiera que el papá de mi hijo, es ocho años más menor que yo?… y de repente me acuerdo del barco, el vaivén del suelo, el caminar con ese vaivén constante, las veces que sentada en la cama junto al padre de mi hijo me pregunté porque no veía un futuro para nosotros y las palabras en su voz grave y suave sobre las cosas que extrañaba de casa, las que extrañaba de su vida en tierra, como si todo se tratara de un pasado distante, cuando la verdad era que solo llevaba seis meses en el barco él y yo tres, esa intensidad de la vida, esa mezcla de reality y libertad infinitas, donde afloraba la personalidad tal cual su naturaleza y me preguntaba porque yo parecía tan cuerda en ese mundo de locos….

Tic tac…. Volver al presente, me quito el reloj mejor, estoy demasiado cansada para pelear contra mi cerebro que me tiene entre el presente y la melancolía, al final no me molesta estar triste, me molesta esta sensación de que no puedo hacer nada más y el dolor, detesto ser vulnerable y si enfermarme implica tomar todo mi auto control para no gritar de la rabia, este dolor que no tiene un punto en específico, que no se subsana con analgésicos y no que no puedo evitar sentir, es más desesperante aun…


Tic tac, el reloj está en mis manos, miro sin ver nada en particular, pensando que el vendrá hasta mi puerta, aunque no sé qué objetivo tendría eso ya… miro mi reloj es de colores suaves, de flores azules y rosas, ¿Cuánto tiempo más va a tener que pasar para que se me pase esta mezcla de pena y desazón? ¿Cuándo voy a poder decir no más! Para salir adelante y sonreír sin pena… Cuánto?


Han pasado horas, las estrellas me recuerdan que debería estar dormida, el frio entra por la ventana abierta y mis ojos están fijo en la tele, tengo que dejar de pensar… en algún minuto tengo que dejar de pensar, no se trata de odiarlo, sino de dejarlo ir, de dejarlo desaparecer del presente como él quiso, después de todo fue él quien desapareció…. Tengo que dejar de creer que va a ocurrir un imposible, que va a venir a decirme que me ama, desesperado porque se da cuenta que me ha herido, rogando que no lo olvide… Tengo que dejar de pensar… Tic tac… suena el reloj que olvide dejar en otro lado y me doy cuenta que mientras más lo intento más pienso en él… Tic tac… Tic tac… Incansable tic tac…

lunes, 2 de febrero de 2015

Salir del caos, entrar al mundo real... veamos que pasara

Las manos enlazadas, la mirada en el frente… escucho una canción que ayuda  a seguir “hasta el fin del mundo”- Aleks Syntek.

Camino sin animo, pero con paso firme, que tengo que hacer?, seguir caminando, no pienses. Llego a un cruce, la gente mira al frente y no me doy cuenta cuando tengo que arrancar de dos hombres y una mujer que se agarran a golpes antes de la entrada al paradero, gente reclama porque los carabinero no hacen nada, otras porque la violencia atrae más violencia, el revuelo se dispersa en una especie de serenidad que da más miedo que calma. Ayer estaba pensando lo peligroso que es esta parte de la ciudad y como se supone que tengo que hacer las cosas para cambiarme de casa, deje todo a un lado porque aunque no quisiera, pensar tanto me revuelve las ideas.

Saco el celular, sé que me lo podrían quitar de las manos, pero no me importa, quiero dejar de escuchar la canción que viene… “Te soñé” - Aleks Syntek… no es lo que quiero escuchar ahora, no quiero recordarlo, no quiero pensar en él y de verdad me iría caminando hasta la casa si no fuera porque es realmente peligroso, mis ideas van y vienen, como dijo mi compañera ¿Por qué no te aviso?... miro por la ventana, la arquitectura clásica en ruinas me hace pensar en que alguna vez este barrio fue bello, pero de eso tiempo, que la gente que vivió quiso este lugar, porque yo no lo quiero?

Entro a casa en silencio, el olor a encierro y calor me reciben, quiero echarme en la cama y dormir hasta mañana, pero entes me preparo algo de comer, mi cama suele atraparme, su aroma me envuelve y es como si estuviera aquí… por qué no te aviso? Tomo las sabanas y las echo a lavar.
Se acabó -pienso determinada-, no quiero saber nada más de él…

Pero no es cierto, espero que hable, que escriba algo, pero no lo hace. Mi cabeza esta al tope máximo de su capacidad de aguante, mejor me duermo, pensar no me hace mejor. Despierto sola, despierto extrañando a mi hijo, despierto pensando que no quiero estar más aquí, que quisiera esta en otro lado, en casa de mi abuela, debería haber tomado un bus ayer, hoy estaría en la playa disfrutando del mar, sola pero relajada con el agua fría… pongo música, armo un desayuno y trato de pensar que hacer hoy… pero no quiero hacer nada… que rabia esta sensación, yo soy mucho más activa, es solo… es solo… parece que hace mil años que no soy como era, activa, dinámica, risueña, jovial, cuando fue la última vez que me reí toda la tarde?...
Cierro los ojos, no puedo evitarlo, un arranque de energía me hace ordenar todo, y cuando me doy cuenta son las cinco de la tarde… tomo los cuadernos de Ceala y vuelvo al punto de trascripción de ayer, pero no consigo entender nada, pongo a Sans para escribir, así que me pongo audífonos y la canción que caiga, estoy más tranquila mis dedos se mueven rápido por el teclado, estoy enfrascada en un párrafo y llama mi mamá, mi hijo se ríe… me siento mejor de ánimo, vale ya voy a lograr sacar de mi cabeza las dudas, pero algo de lo que dice mi mamá me lo recuerda… rayos estábamos tan bien… “A contratiempo”-Ana Toroja, es la canción que empieza a sonar, rayos esto no es bueno…
Recuerdo una conversación con mi hermana pequeña:

"No es bueno que la banda sonora de tu vida, sea tan melancólica hermana, lo único que vas a atraer a tu vida son cosas melancólicas."


Cierro los ojos, de verdad quisiera llorar… porque me duele tanto su indiferencia? Su ausencia es algo tan difícil de soportar, su indiferencia me hace pensar que de verdad no tiene real interés en mi… pero si es así para que viene a mi casa? No quiero pensar más, no quiero saber nada más… “Corazón Partido”- Alejandro Sanz, me hace reír… ok de verdad esto es deprimente, tal vez sea hora de hacer algo.

Sali del caos entrar al mundo real, qué va a pasar?

Me duele, me duele… debería dejar de pensar y hacer más cosas para poder salir de este estado… pero es que es tan fuerte como me duele y no puedo evitar querer llorar o gritar… porque fui tan irremediablemente inconsecuente? Que acaso no me he dicho mil veces ya que debo cuidar el corazón?... porque mi cabeza sabe las cosas, y mis acciones no? Por qué?
Quise salir arrancando antes de siquiera hablarle, quise hacerme la tonta a la sensación de absurdo desazón… apagué el celular incluso toda la tarde antes de hablar, porque se me revuelve todo al tratar de decirle algo de lo que está pasando por mi cabeza… quien soy yo para decirle nada, para pedirle nada, si fui yo la que lo ha dejado hacer y deshacer…
Mareada con la misma rabia que me da tener que decirle que lo que está haciendo me duele… porque debería ser obvio que me está hiriendo y la certeza de que la mente de un hombre no atina a entender las mismas cosas que la de una mujer, asumo que antes de decir esto me duele hay que explicar lo que pasa… y mi rabia me ciega, como rayos un adulto no sabe lo que está haciendo? O es que lo sabe y espera este resultado? Y mientras mi cabeza ronda la pregunta es que soy tan ingenua que no veo lo obvio? O es que estoy pensando más de la cuenta y sacando conclusiones?… me siento en la cama. Odio las conclusiones de una sola parte de la historia… así que la verdad. Miro al frente, bien veamos la verdad y parto explicándole la verdad... mi verdad…
“… alguna vez te dije que tenía miedo de dejarme llevar más allá de un cierto punto… bien era exactamente por cosas como esta… (explico mi reclamo simple) … y me duele… sabes que lo más absurdo es que no te culpo a ti sino a mí por dejarte entrar en mi vida… “
Me detengo un minuto y me pregunto si esto va a doler más de lo que me duele lo que ya está sucediendo, y es que me duele tanto que no creo que pueda ser peor, al final siempre supe que si esto seguía era porque yo procuraba que continuara obviando los desaires, la constante lejanía y de repente no me doy ni cuenta y estoy diciéndole lo que pienso sin filtrar nada…
“… en serio no me merezco esto, algún día ponte sobre tus dos pies y en serio mira cómo se ven las cosas desde acá y si serías capaz de estar contigo del modo que yo he sido contigo… si podrías querer tanto a otro que te ignora o simplemente no tienes idea que piensa…”
Lo envió y me doy cuenta que duele más… rayos podría llorar, pero no quiero, sostengo mis lágrimas porque estoy sola y sola puedo creer que soy fuerte y que lo que duele pronto pasará, aunque no sé cómo sostener mi ánimo, veo la película y trato de no pensar más, pero mi imaginación no va con mi intención de salir del tema, debería dejar de quererlo y si ya lo amo? No, no puedo, es que no debo?, ¿cómo se supone que uno deje de querer a otro sin que duela? Deberían haber clases para que uno no sea una total estúpida frente a un hombre, o es que no fui estúpida?, fui incapaz de cuidar mi corazón y mientras más iba queriendo a este hombre más lo dejaba ir y venir sin compromiso, sin certezas y lo más absurdo sin siquiera procurar un futuro juntos, todo era momentos instantes juntos… sin minuto de realidad, nada de esto que sucede entre nosotros podría haber pasado si fuera realista, si cerrara los ojos a todo lo que el significa y viera lo que me estaba haciendo a mi misma… atrás quedo la versión de mí que era capaz de cuidarse, la que era capaz de cortar una relación cuando esta era dañina… la que fue capaz de tener una relación con un hombre y tener plena conciencia de que tendría termino, atrás quedo esa versión más realista, esa que cuando quedo embarazada hiso lo correcto y termino viviendo las consecuencias con plena conciencia de que no podría haber hecho otra cosa, porque sería incapaz de vivir con las consecuencias de un aborto o de mantener al margen al padre de la criatura…
Si la maternidad me ha cambiado, ahora veo a otro y lo trato de cuidar, como cuando vi sus ojos cansados y me pregunté si no sería capaz de cuidarlo… quererlo y desearlo, vino más tarde... porque soy incapaz de dejar de preocuparme por él, o que su presencia frente a mi tiene un efecto hipnótico que no consigue nadie más y de verdad quisiera tener un buen argumento para olvidarlo, pero hasta ahora nada… mi cabeza esta revuelta, mis sentimientos a flor de piel, quisiera llorar a mares... odiarlo... pero francamente no puedo... que rayos se supone que puedo hacer ahora... cerré los ojos y me quedé dormida a las 5 de la mañana, con la tv prendida...