Había reído de mil amores, pero en realidad lloré.
Tenía hace día la idea de hacer algo definitivo, pero no
sabía si seguir inmersa en esta situación o no y cuando me dieron la noticia,
lloré. Para una persona sola, responsable de un crio de tres (ahora casi 4
años), es complicado saber que el dinero que ganas no es suficiente, y más aun
que el horario que tienes en la oficina afecta al punto de no tener el tiempo que
deseas para las cosas como desearías que fueran. Pero no quería quejarme,
siento que al alegar por estos detalles, disminuyó el valor real de mi trabajo,
así que como otras tantas cosas deje a un lado mi desazón y seguí con la sonrisa
en la boca y la mirada en el futuro, porque lo que más importa es darle un
futuro al pequeño y tener un trabajo estable con un sueldo fijo es el mejor
modo de darselo.
Pero hoy, hoy me callo el peso de los días, las horas, y los
meses de olvidar ese sentimiento encima. Para colmo me calló cundo me entero
que nos ganamos un premio a la excelencia y que nos va a llegar un bono del 5%
del sueldo bruto durante los próximos 12 meses. La noticia que se supone alegra
a todo mundo a mi me hiso llorar. Que habría pasado si no lo ganábamos?
Demás esta contar que no tenía ni idea que nos darían algo
así y que no me lo esperaba, o que no esperaba que me diera pena en vez de
alegría, pero lo cierto es que en algún lugar había estado guardando toda la
frustración que me genera los sin sabores de mi trabajo y obviamente afloraron
con la buena noticia.
Hablé con mi hermana y trate de explicarle lo que ni siquiera
yo termino de entender, tengo pena por esta buena noticia, siento que es solo
un parche a la situación y que en algún minuto ese parche se va a salir y va a
salir a flore la verdad.
Si hago recuento, ahora que lo medito un poco, la sensación
de desazón se hiso más profunda cuando empecé a buscar departamento, los pocos
departamentos que he encontrado, son muy caros o están en muy mal estado, y
cada vez que analizo el panorama monetario veo que necesito ganar más dinero. La
parte que me produce conflicto es que la plata extra no la voy a poder ahorrar,
no la voy a poder gastar en cómprame algo para mí, la plata la voy a ocupar en
algo para apalear que no me alcanza mi sueldo para vivir con mi hijo en Santiago
y no puedo evitar preguntarme, porque no me alcanza?
No tengo deudas con el banco, compro todo al contado, no le
debo plata a nadie (ni siquiera a una casa comercial), no compro ropa si no la necesitó,
me compro los zapatos con el bono que me dan del trabajo, uso uniforme así que
mi ropa de casa esta ok, no gasto en salir a bailar, no me compro alcohol, no
fumo, ando en micro para todos lados, no me he cortado el pelo en la peluquería
hace… cuatro meses, que pasa que el dinero no me alcanza, de donde recorto para
que pueda hacer lo que necesito para mí y por mi hijo?
La respuesta es bastante obvia, debería buscarme un trabajo
en el que gane lo que necesito para vivir, debería ver modos de inversión que
me permitan trabajar mi dinero, y buscar con pinzas el departamento, porque al
final quiero creer que voy a lograr encontrar algo en el precio, con las características
que necesito y cerca de mi trabajo, para ahórrame la micro y tener a mi hijo
cerca si es que el me necesita.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario