Tengo que
confesar que la parte más difícil de esta última semana fue asumir que nada de
lo que aparente es real, no estoy sana como aparento, no estoy saludable y quizá
me sienta bien y tenga ánimo, pero es parte del conjuro de la vida de Julián y
aunque va a durar mi vida entera, no quiero fiarme de él, quien sabe si mañana
muero definitivamente.
En mi casa,
sola en mi habitación comencé a pintar un cuadro, no me di cuenta en un
comienzo que era lo que estaba pintando, y como hace poco partí con las clases
de pintura en serio, demore un rato en entender que necesitaba que mi
subconsciente guiara mi mano, la imagen era tan nítida al cabo de tres horas
que podía saber que era un retrato de mi madre, pero ella estaba vestida con
otra ropa y tenía joyas que nunca le he visto.
Cuando
anocheció, esperé a Julián, como todas las noches, su sola presencia me hace
sonreír y sentir que todo tiene sentido, había olvidado en parte lo de tener
hijos y ser madre. Julián tardo más de lo habitual y cuando llego algo andaba
mal, sus movimientos mostraban enojo, furia.
“Hola amor, te
extrañé”- lo saludé.
Me besó la
frente, y se fue hasta la cama donde se sentó.
“Si yo también
te extrañé”, le respondí irónica, pero el no dijo nada, me acerque y lo besé
suavemente, el respondió con algo de furia y melancolía.
Pasarían dos
horas antes de que hablara.
“No lo soporto
más… porque no me has dicho si quieres tener una relación con un ser humano y
tener hijos y dejarme y… “
“Que?... qué?..
Queeé?”
“Vamos, no
puedes decir que te he presionado, o que te molesta, fuiste tú quien me dijo
que quería pensar en tener familia, ha pasado más de un mes, has pensado o no
en el asunto, me vas a dejar o no?”
“Pero… yo… Julián!
-dije molesta- tu… eres un crío ¡Que no entiende nada!.” -dije volteándome
hacia mi pintura.
“Amor, no lo
soporto, dime que has decidido.”-suplico acercándose a mi.
“Julián, yo no
tengo nada que decidir, te amo, eres mi pareja y quiero estar contigo, si ser
parte de tu vida implica que nunca tendré hijos, bien esa es la opción de vida
que tomo, si ser tu pareja implica tener que lidiar con cosas sobre naturales,
bien aprenderé. Pero no quiero estar con nadie más, de donde sale toda esta
angustia y miedo?”
“No importa.” dijo
alejándose molesto.
“A ver, como que no importa?... vienes me dices de todo y no importa… habla, será mejor que hables o seré yo quien se moleste contigo.”
“A ver, como que no importa?... vienes me dices de todo y no importa… habla, será mejor que hables o seré yo quien se moleste contigo.”
“Antes de venir
aquí, pasé a ver al oráculo, quería saber cómo estarías y darte ánimos si es
que el cáncer se te activaba, pero el oráculo me dijo que hay un hombre que está
rondando tu vida, y ese hombre puede darte lo que yo no… asumí que era un hijo,
porque no sé qué más podría ser.”
El oráculo…
veamos en mi lista de cosas raras esta era francamente la menos rara, era
natura un grado de incertidumbre sobre el futuro y si los seres humanos
normales podían ver el futuro, un vampiro podría ver muchos más y en planos más
avanzados… pero eso no explicaba cómo se supone que hay un hombre rondando mi
vida del que yo no tengo idea.
“Amor, amor no
digas tonterías, por favor. Eres la única persona que está en mi vida, y si me
lo preguntas el oráculo no miente, mi médico puede darme lo que yo necesito,
hace una semana supe que mi cáncer se está activando y que tengo que nivelar
anemia y otras cosas que no están bien en mí, pese a que no me siento enferma.”
Julián miro a
un lado, si fuera humano estaría ruborizado, pero sólo lograba ver un tenue
brillo de vergüenza en sus ojos. Me abrazó con fuerza y mientras lo hacía concluir
tenía miedo a perderme y que algo completamente irracional se había apoderado
de él desde que supuso que otro hombre podría acercarse a mí y eso me dejaba más
interrogantes que respuestas.
“Amor, yo…” -Julián
me besó y no dijo nada más, en un segundo estaba en mí, en dos ni siquiera
podría recordar lo que había pasado y en tres estaba disfrutando de un placer
increíble que sólo se traduce en palabras a amar a Julián.
Pero cuando
todo concluyo y mis ideas se pusieron en orden, volví a preguntarme cuánto
tiempo más tardaría en conocer el lado oscuro de Julián y de que se trataría
ese lado oscuro.
La noche fue
extraña en tantos sentidos que no quiero recordar todo, pero hubo otra cosa que
no puedo omitir, recuerdo que estábamos sobre la cama, y de pronto se quedó
dormido a mi lado, pasarían unos quince minutos y despertó.
“Julián, hasta
donde yo sabía los vampiros tiene que dormir de día estar despiertos de noche. Acabas
de despertar, que está pasando?”
“Cariño mío, los
vampiros podemos estar despiertos de día, sólo que preferimos no hacerlo,
porque nos da más hambre y sólo podemos comer de noche, porque contrario a lo
que entiendas por comer, si comemos durante el día se producen alteraciones en
nuestro modo de razonar, han habido casos de vampiros que se volvieron locos, a
los que tuvieron que matar.”
“Ósea que puedes
estar despierto, ¿pero no puedes comer?, eso suena raro.”
“Como va a
sonar eso raro, hay miles de cosas que no son normales y no te suenan raras,
pero lo de la comida no lo comprendes… jajaja”
“Y entonces que
haces antes de venir a verme?”
“Ceno algo
contundente para poder estar el resto de la noche contigo y cuando regreso a
casa vuelvo a comer algo más y me voy a dormir un par de horas.”
“¿Cuáles son
tus platos favoritos?”
“Pastel de
carne con jugo de sangre de cordero.”
“No suena rico… y no tomas sangre humana? Nunca?”
“He probado la sangre humana, pero tiene efectos secundarios en nosotros, nos pone volubles, además su sabor está dado por las emociones que tenga y la mejor es la que uno puede obtener de alguien que este alegre, pero créeme que esa alegría suele evaporarse cuando uno comienza a beber y la sangre con demasiado placer… bueno digamos que nos deja con la lívido un poco más alto.”
“No suena rico… y no tomas sangre humana? Nunca?”
“He probado la sangre humana, pero tiene efectos secundarios en nosotros, nos pone volubles, además su sabor está dado por las emociones que tenga y la mejor es la que uno puede obtener de alguien que este alegre, pero créeme que esa alegría suele evaporarse cuando uno comienza a beber y la sangre con demasiado placer… bueno digamos que nos deja con la lívido un poco más alto.”
Mire sus ojos,
y sentía el deseo de besar su boca, tome su rostro y lo lleve hasta mi pecho
antes de tenerlo otra vez quise que escuchara mi pecho, y como latía mi corazón.
“Escuchas
eso?... ese es mi corazón que está lleno de alegría y deseo por ti.”
Julián beso mi
pecho y de pronto sentí un placer extraño brotar de mí, era como si… él estaba
bebiendo de mi sangre, y aunque no podría traducir el placer que eso me
causaba, me dio algo de miedo, no dije nada el simplemente dejo de beber, y
cuando sus labios besaron los míos no había rastros de sangre en su boca, pero
si un sabor a miel que me embriagaba, sentí sus manos recorrer mi espalda, sentí
sus besos dejar una huella sobre mi piel, como si a pesar de que su boca no
estuviera allí, la sensación de sus labios sobre mi piel persistiera.
No logre
controlar mucho más mi estado de conciencia, y de pronto estaba parada junto a
él contra la pared, en otro segundo sentada en el borde de la cama y luego
volando sobre la cama, las imágenes se me volvieron confusas, todas ocurrían al
mismo tiempo, todo parecía ser tan diferente sus movimientos, su velocidad y de
pronto comprendí a que se refería con la lívido alta, pero aun ahora me cuesta
traducir todo lo que paso a palabras.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario