lunes, 8 de abril de 2013

Estas en mi vida (P11)

Salir del caos, entrar al mundo real... veamos que pasara


“Hija no condeno que te desaparecieras, condeno que no entiendes que me preocupe por ti, o que crees que había estado haciendo la semana previa a tu desaparición?”
“Mamá… ya te dije que lo siento”
“Lo siento hija, no cambia las cosas.”
“Prometo que no va a volver a suceder.”
“Bueno por lo menos eso es algo… y como esta Julián?”

Mi madre dirigía la conversación, que francamente no tenía intención de cambiar, porque estaba molesta y tenía razón. Viviana había salido de comprar con ella y habían hablado de mí, por lo que está a punto de enterarme ambas creían que o Julián me había raptado contra mi voluntad, o me había vuelto loca; porque nunca había desaparecido de este modo.

“Tu hermana está preocupada por ti, tu padre no quería ni que viniera sola, incluso tu cuñado ha estado preguntando por ti.”
“Te lo prometo, no va a volver a pasar”
“¿Qué pasó con las clases de pintura, las vas a retomar?”

La conversación continua de un tema a otro y a intervalos tenía que volver a repetirle que no iba a desaparecer, pero era el modo de mi mamá de estar segura de que entendía su preocupación. Cuando se fue, subí a verlo, su sola presencia llenaba mi habitación.

“¿Cómo te fue?”
“Está preocupada.”
“Debiste llamarla cuando te lo dije…”
“No quería hacerlo, además aunque está preocupada ahora está segura de que estamos juntos porque es lo que queremos y eso la tranquiliza, imagínate que creyó que me habías raptado…”- reí de buena gana.
“No es gracioso.”
“Claro que lo es, no me habrías podido raptar en pleno día desde la Avenida Perú.”
“Pero ella no sabe eso y si cree que soy capaz de raptarte, ¿qué opinión tiene de mí?”
“No lo sé -respondí seria- no lo sé, pero ahora sabe que fui yo quien te rapto y que estoy bien, además esta semana de verdad pasó demasiado rápido, te creo que me hubiera pasado un mes. Además si tanto le preocupaba que estuviera mal, porque no entro con su llave el martes o el miércoles, cuando estuvo aquí y se llevó su auto?”

Julián me miraba, pero estaba pensando en otra cosa, porque no me veía realmente, él estaba cansando, había pasado casi todo el día despierto y tenía que dormir antes de la puesta de sol o pasaría lo mismo que la noche anterior, estaría tan hambriento que necesitaría más de un litro de sangre para recuperarse, y pese a que no me molestaba que de vez en cuando sacara sus dientes para probarme, me parecía algo extraño ser la cena de mi pololo, porque honestamente no es el tipo de relación que quiero tener con él.
Sus besos se volvieron cansados y sus movimientos más difíciles, así que me aleje un poco para darle espacio y se quedó dormido. Yo aproveché de ir por algo de comer, por mi computadora y de bañarme cuando vi que tenía por lo menos tres horas de ventana para hacer lo que quisiera. Esta relación es un tanto absorbente pero es así porque yo le he permitido absorber mi tiempo.
Mientras me miraba el pelo que definitivamente se me veía mejor que nunca, y me observaba en el espejo mi figura más esbelta, pensé en salir de viaje, en recorrer el mundo, tengo vida, ‘porque no la aprovecho mejor?’…Si nos iríamos de viaje, era lo mejor.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario